(+34) 900 861 374 Lun-Vie: 8:00 a 18:00
Es probable que hayas oído hablar mucho de las sicav y es posible que todavía no tengas muy claro en qué consisten ni si son una fórmula de inversión a la que te puedes acoger. En este artículo te vamos a contar en qué consisten, los requisitos para constituir o formar parte de una de ellas, sus ventajas y sus inconvenientes.
El término sicav es un acrónimo que significa Sociedad de Inversión de Capital Variable y, por tanto, su función es invertir dinero en instrumentos financieros para obtener una rentabilidad económica.
Las sicav como el resto de Instituciones de Inversión Colectiva (IIC) están regidas en España por la Ley 35/2003. Además de a las sicav, dentro de estas IIC podemos encontrar también a los Fondos de Inversión, a las Sociedades de Inversión no Financiera (para inversión inmobiliaria y arrendamientos) y a otro tipo de sociedades de inversión no financieras.
Las sicav tiene una actividad similar a un fondo de inversión pero tienen varias diferencias fundamentales:
Sin embargo, la diferencia fundamental entre ambas formas de inversión está en la fiscalidad. Siempre y cuando el número de accionistas de la sicav sea al menos de 100, los beneficios obtenidos por la sociedad solo tributarán al 1% y no al 25% que se aplica al resto de sociedades mercantiles.
Con nuestra guía de financiación alternativa podrás aprender todo lo que debes saber acerca de cómo conseguir financiación más allá del banco.
FINANCIACIÓN ALTERNATIVA
GUÍA GRATUITA
El razonamiento detrás de esta tributación tan baja es que como todos los beneficios de las sicav tienen que acabar reinvirtiéndose en nuevas inversiones, no tiene sentido tributar mientras los accionistas de la empresa no retiren su dinero de la misma. Por tanto, este 1% es algo simbólico (en otros países de la Unión Europea, el tipo llega a ser tan reducido como un 0,01%), ya que la tributación real viene cuando los accionistas retiran el dinero de la sicav. Una vez que se produce este reembolso definitivo, el inversor tendrá una retención de un 19% que después se ajustará mediante el tipo aplicable en su declaración de la renta. El inversor también tiene que pagar esta misma retención al cobrar dividendos de las sicav.
Los rendimientos obtenidos de las sicav fiscalmente se consideran ganancias patrimoniales, no rendimientos del capital mobiliario, por lo tanto tributan en la base imponible del ahorro, no en la base imponible general, soportando así mucha menor carga impositiva.
Por ejemplo, si un contribuyente ingresara por encima de 60.000 euros en concepto de capital mobiliario, el tipo marginal que se le aplicaría sería del 45% y si lo hubiera ganado vendiendo participaciones de una sicav el tipo sería de un 23%.
Además, al tributar en una base imponible distinta, estas ganancias no se sumarían a los rendimientos que el inversor obtuviera de su trabajo o de otras actividades profesionales y por lo tanto no incrementarían el tipo marginal de la base imponible general, lo que sí sucede, por ejemplo, cuando se cobra un plan de pensiones.
Todos estos beneficios fiscales han provocado que muchas grandes fortunas se hayan acogido a esta fórmula de inversión para evitar o al menos aplazar el pago de impuestos. Este motivo es el que ha generado la mala prensa que habitualmente se asocia con estas sociedades. Pero en realidad, según los expertos, la fiscalidad no es el problema fundamental de estas sociedades, sino que que son los siguientes:
Estas críticas y otras han hecho que desde diversos sectores se haya solicitado una reforma de las sicav para quitarles el aura negativa que actualmente flota sobre ellas y convertirlas en un instrumento de inversión más sin ningún tipo de connotación.
¿NECESITAS AYUDA?
VISITA NUESTRA PÁGINA DE RECURSOS Y EXPLORA GUÍAS PARA MEJORAR LA TESORERÍA DE TU EMPRESA
Amaris velazquez
04/04/2021
Buenos días, me pregunto porqué, pido traslado de oficina de BBVA,y me dicen,que puedo pasar todo menos,contratos de gestión de carteras y SICAV.