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El ahorro de tiempo y recursos es una de las claves para mejorar la rentabilidad y productividad. Las herramientas digitales ya están integradas en muchas áreas de las empresas, lo que simplifica los procesos. Sin embargo, el área financiera no se encuentra al mismo nivel de digitalización.
En este artículo, analizamos cómo optimizar los procesos de facturación para ahorrar costes e impulsar las finanzas en la empresa.
La gestión de facturas se divide en dos tareas esenciales: generar las facturas de venta y tramitar las facturas de gastos. En el primer caso, se trata de las facturas de los productos o servicios que comercializa la empresa. En el segundo caso, nos referimos a los pagos a proveedores de productos y servicios que la empresa necesita para desarrollar su actividad.
Cuando los procesos no están optimizados y automatizados, se corre el riesgo de incurrir en errores y retrasos en el cumplimiento de las obligaciones. Principalmente, la gestión ineficaz de facturas puede ocasionar estos problemas:
La consecuencia de lo anterior es que el departamento financiero invierte mucho tiempo y recursos en revisar y gestionar las facturas.
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La automatización de tareas no solo optimiza la gestión, sino que minimiza los errores y puede ahorrar grandes cantidades de dinero a la empresa. Esto es lo que se desprende del informe La gestión financiera en las empresas españolas: previsiones, gastos y tendencias, elaborado por Payhawk. Según este estudio, la falta de digitalización genera pérdidas superiores a 120.000 euros anuales en el 20 % de las empresas que aún realizan estas tareas de forma manual.
Para lograr un proceso eficiente en la gestión de la facturación, en primer lugar es necesario analizar la situación actual para detectar puntos de mejora, tales como:
Un buen software de facturación puede ser el mejor aliado de la empresa para solucionar los problemas descritos anteriormente. Además de eso, conviene diseñar un proceso eficiente, lo que ayudará a impulsar las finanzas de la empresa.
El proceso de gestión de facturas tendrá que adaptarse a las características y necesidades concretas de tu empresa. Conviene definir con precisión las etapas que hay que seguir cuando llega una factura. Como normal general, el procedimiento será:
El diseño del proceso debe incluir plazos de tiempo para cada fase, métodos de pago, sistemas de cobro y políticas de devolución.
Los empleados deben conocer este procedimiento para saber qué pasos dar en cada caso. Además, es esencial que tengan unos conocimientos mínimos de la legislación relativa a facturación.
Tan importante como el seguimiento de los pagos, es el control de los cobros para evitar problemas de liquidez. Los programas de facturación automatizan el proceso y proporcionan información actualizada sobre facturas pendientes y vencidas.
Automatizar el proceso ayudará a reducir errores y tiempo de gestión. Un software de facturación adecuado al tipo de negocio facilitará el control de cobros y pagos. El programa elegido debería ser flexible, sencillo e intuitivo, ya que una curva de aprendizaje rápida ayudará a obtener el máximo provecho de la tecnología.La gestión de facturas es un proceso vital para mantener unas finanzas saneadas. La digitalización puede ser una gran aliada para agilizar los procedimientos y reducir el tiempo dedicado a tareas repetitivas que no aportan valor.
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