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Las oportunidades no surgen de la nada, no te engañes. Si quieres invertir tiempo y dinero en un negocio, antes debes aprender a mirar qué sucede a tu alrededor. Para dar forma a un proyecto es necesario que fijes toda tu atención en el mercado, que analices lo que en él sucede y que busques la solución a los posibles problemas que aparezcan en tu recorrido hacia el éxito.
¿Ya sabes cuáles son tus cualidades? Si quieres saber qué buscan o quieren los demás, antes debes preguntarte cómo eres tú. Tus propias aficiones o habilidades pueden ser un buen punto de partida para generar una idea de éxito. Puede que a partir de una necesidad propia encuentres ese producto o servicio que todavía no está a la venta en el mercado.
Olvida el miedo al fracaso y céntrate en aquello que conoces. Cuando se trabaja en un sector con el que estás familiarizado aumentan las posibilidades de encontrar la oportunidad que estabas buscando.
Para hacerlo, lo primero que necesitas es tiempo y mucha paciencia. Sólo con una buena capacidad de observación encontrarás aquello que buscas. Te damos algunas claves.
Siempre hay un público objetivo por descubrir. O que simplemente no está siendo atendido de la mejor forma. La estructura social siempre está cambiando y en esa evolución puede surgir un segmento de población que tenga unas necesidades específicas.
Tras identificar las carencias del mercado, elabora un proyecto en el que aportes soluciones creativas o innovadoras a problemas comunes. Para encontrarlas hazte estas preguntas:
¿Podré revolucionar el mercado con ella o tal vez exista ya una idea tan innovadora como la mía?
La solución ¿supone la creación de un nuevo producto o servicio o simplemente significa una mejora en los que ya existen?
¿Cuento con los recursos necesarios para adoptar esa solución que he encontrado?
Si ya has identificado la mejor oportunidad para tu empresa, llega el momento de buscar al equipo adecuado. Rodéate de personas que sean expertas en aquellas fases del negocio que desconoces, ya sea el marketing, la tecnología o la contabilidad. Empresarios tan conocidos como Steve Jobs o Richard Branson afirmaron en más de una ocasión que, gracias a la confianza depositada en los equipos con los que trabajaban, sus negocios alcanzaron el éxito.
Esto también significa que debes de dejar de lado tu ego y que, tal vez, debas pedir consejo. La experiencia de otros empresarios puede darte la solución que estabas buscando.
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