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Nunca está de más reducir ciertos gastos que se van generando con los años en tu empresa y ni siquiera te das cuenta. De hecho este es uno de los objetivos prioritarios para muchos empresarios.
Decimos esto porque, poco a poco, se van sumando a las cuentas de tu empresa ciertos costes que no tendrían por qué estar ahí, porque quizá sean totalmente irrelevantes para tu compañía y aún no lo sepas.
Son costes que pueden resultar banales pero que finalmente acaban presionando las cuentas de tu empresa. Y no importa ni el tamaño, ni la industria ni la ubicación de esta, pueden aparecer en cualquier momento.
Esto es lógico, pero no te preocupes, te traemos la forma más fácil de ver cómo se van a ir reduciendo esos gastos poco a poco si sigues los consejos de este post.
En primer lugar, para reducir gastos es primordial establecer una estrategia que nos vaya a garantizar que finalmente lo vamos a llevar a cabo. Siempre y cuando claro no afecte a la productividad y la calidad de nuestros productos y servicios.
Para llevar a cabo nuestro plan, vamos a seguir una serie de pasos:
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Estos últimos son muy comunes pero poco conocidos o, mejor dicho, no se suelen tener muy en cuenta. De hecho es uno de los aspectos clave a la hora de reducir costes.
El aprovisionamiento abarca un conjunto de actividades que normalmente desarrollan las empresas para asegurar la cantidad de los bienes y servicios que necesitan adquirir de manera externa, y así poder desarrollar la propia actividad de su compañía. El aprovisionamiento siempre conlleva ciertos costes por parte de los proveedores, pero muchas veces algunos de ellos podrían reducirse.
Dentro de esta reducción de gastos, es primordial que sepamos cómo manejar la demanda. Es decir, centrarnos en el “aprovisionamiento” estratégico para saber gestionar lo que nuestros clientes demandan y así poder centralizar nuestra actividad con los proveedores teniendo en cuenta meramente dicha demanda.
Dicho así parece un poco lioso, pero vamos a ver qué tendríamos que valorar realmente para reducir gastos:
Podemos encontrar:
Todos estos son costes a los que debemos ir haciendo frente y, si los sabemos gestionar bien, podremos ahorrar más de lo que pensamos.
Una buena técnica para ello es la colaboración y negociación con los proveedores, así podremos reducir la mayoría de costes variables.
Veamos cómo podríamos hacerlo:
Debemos hacer mención también a la parte de directa de las compras, ya que debemos comprar económicamente y no barato para que, una vez más, esto no repercuta en la calidad de nuestro producto o servicio.
Para eso debemos:
¡RECUERDA!
Cuando reducimos costes de aprovisionamiento o proveedores, no debemos aplicarlo solo a este mismo área, sino que deberá extenderse la misma estrategia a toda la corporación, por ejemplo en cuanto a gastos de personal; gastos de representación o incluso financieros. Ya que el objetivo es poder ahorrar todo lo posible y esta responsabilidad es de todos.
¿Crees que estos consejos podrían ayudarte? Si utilizas algún truco en cuanto a la reducción de costes de proveedores ¡cuéntanoslo! Nos encantaría poder aplicarlo a Novicap.
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