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Existe una preocupación común a todos los profesionales que lideran equipos formados por personas. Se trata de evitar cometer errores de estrategia que pongan en peligro el fin colectivo de la misión. Si, pero y esto ¿Cómo se consigue?
Detectando fisuras
Estamos hablando de descubrir posibles puntos débiles de cada una de las estrategias a seguir antes de llevarlas a cabo. Para tomar perspectiva, resulta muy interesante analizar ciertas técnicas militares utilizadas por el ejército de los EEUU con excelentes resultados. El objetivo será aplicar estas mismas estrategias en la empresa.
Los militares, expertos en el análisis de debilidades
Descubrir posibles puntos débiles en su enemigo, es una de las estrategias más antiguas que han empleado los ejércitos a lo largo de la historia. Si en plena misión surge una brecha imprevista, los líderes se verán obligados a tomar decisiones sobre el terreno y aunque a veces resulten acertadas, siempre existe el riesgo de equivocarse y acabar fracasando. En el caso de una guerra, las consecuencias podrían ser fatales implicando pérdidas humanas, si hablamos de la empresa no resulta tan dramático pero sin embargo puede ocasionar pérdidas relevantes que pongan en peligro la actividad del negocio. Las mismas técnicas que el ejército ha confeccionado a lo largo de años de experiencia pueden aplicarse a la empresa con el objetivo de anticiparnos a los problemas y establecer un cambio de rumbo cuando la situación lo requiera.
4 Técnicas infalibles contra errores inesperados
El término pueden sonar a película de ciencia ficción pero lo cierto es que resultan muy útiles. Podemos prever que X o Y podrían ocurrir en alguno de nuestros escenarios, pero ¿qué ocurre si es una inesperada Z la que hace acto de presencia en plena estrategia?
Evitar el pensamiento en equipo
El pensamiento en equipo ocurre cuando los miembros de una organización creen firmemente que su visión acerca de una situación es la única correcta, por lo que no serán capaces de ver más allá. Dicho así parece algo inusual, pero la realidad es que este tipo de pensamiento colectivo ocurre con frecuencia.
Creación de equipos y asignación de tareas
Esta técnica consiste en formar diferentes equipos a los que se planteará una misma situación pero desde distintos puntos de vista. Su trabajo consistirá en desarrollar alternativas para cada uno de los puntos de vista asignados.
Por ejemplo:
Una vez obtengamos los resultados de los diferentes equipos, tendremos que comparar las hipótesis que se concluyen y determinar entre todos qué medidas tendrían un mayor impacto positivo.
La importancia de los desencadenantes
Resulta especialmente importante aprender a identificar los desencadenantes de determinadas situaciones. No significa que porqué se de uno de ellos estamos abocados a un escenario concreto pero sí será necesario no perder de vista estos disparadores para estar preparados.
Esta es otra técnica rutinaria del personal militar y que pretende encontrar capacidades únicas o fuentes de ventaja competitiva sin explotar. Por ejemplo, en el ejército los aviones fueron utilizados en un principio para aumentar la visibilidad topográfica y los movimientos de las tropas sin embargo a partir de 1.900 este mismo medio comenzó a usarse para entregar ordenanzas y llevar a cabo la guerra.
¿Cuáles son tus aviones en la empresa?
Y ahora miremos hacia dentro… Materias primas clave, maquinaria de última tecnología, cualquier factor con el que contemos puede llegar a ser realmente relevante. Si pensamos en posibles escenarios futuros, incluso adversos, ¿podría alguno de estos factores convertirse en una nueva línea de negocio que nos ayude a adaptarnos o sobrevivir?
¿Cómo obtener esta valiosa información?
Además de lo que podamos concluir desde dentro, a veces una perspectiva externa aporta información muy valiosa sobre las fortalezas de nuestra organización. Los clientes o un consultor estratégico externo pueden ser dos interesantes fuentes de las que extraer pistas.
Al igual que los militares llevan a cabo entrenamientos simulando batallas en vivo a través de juegos de guerra, las empresas también pueden hacer lo mismo para mejorar sus habilidades.
¿Cómo practicar?
Selecciona perfiles profesionales de alto desempeño para liderar equipos opuestos. Sus miembros deben de tener experiencia en áreas específicas del juego. Antes de comenzar el ejercicio habrá que preparar una presentación que describa el desafío general del juego aportando información y datos específicos. Cada grupo deberá presentar sus conclusiones al final. La motivación a todos los equipos será una clave fundamental para obtener excelentes resultados. No podemos olvidarnos de ofrecer una atractiva recompensa al equipo ganador o incluso a todos los participantes.
Otra forma de anticiparnos a los posibles escenarios es crear diferentes grupos estratégicos con personas capaces de analizar problemas desde diferentes perspectivas.
Las conclusiones son sorprendentes.
En algunas empresas que han llevado a cabo esta iniciativa se han detectado oportunidades de negocio como por ejemplo posicionar un nuevo producto como parte de una estrategia de lanzamiento.
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